El efecto regenerador y cicatrizante del Aceite de Rosa Mosqueta actúa intensamente desde las primeras capas de la piel, nutriéndola y enriqueciéndola naturalmente.
Los beneficios son increíbles. El proceso de Prensado en Frío otorga un Aceite más rico en propiedades benéficas, al hacer que éste conserve intactas todas sus cualidades.
Posee hasta un 80% de ácidos grasos polisaturados, como el linoleico, linolénico, oleico, y palmítico; estos ácidos son indispensables para la regeneración de la membrana celular y renovación de tejidos cutáneos. Contiene también Vitamina A ácida, nutriente vital en la formación de la membrana de las células, los mecanismos de defensa, y el crecimiento de la piel.
Además de sus efectos en las capas externas de la piel, el Aceite de Rosa Mosqueta también vitaliza las células de las capas interiores, revigorizando el fibroblasto, células que producen colágeno y elastina, responsables de la firmeza y elasticidad de la piel.
Arquetipo:
Patrón de desequilibrio: